lunes, 18 de marzo de 2013

Pepa García: Romanie


Pepa García tiene cincuenta y cinco años. Madre de un hijo de veintytres y otro de veintiseis. Se quedó viuda cuando solo tenían cuatro y siete años. Desde entonces tuvo muchos trabajos para poder salir adelante sin profesión. Ahora justo hacía quince años que estaba muy cómoda de auxiliar en una constructora, pero hace  tres meses y medio que la empresa cerró y ella no tenía ni paro( la habían tenido de autónoma por alguna razón que favorecía a la empresa). Nunca se imaginó que  este trabajo acabaría, además hacía solo cuatro años que por fín se había hipotecado. Ahora no sabía qué hacer. Sus hijos estan viviendo en el extranjero intentando encontrar un futuro mejor. Ella sin trabajo, cincuenta y cinco tacos, hipoteca y sin ahorros. Durante estos meses había estado en entrevistas de trabajo casi cada día pero no había salido nada, ni siquiera si se ponía escote y tacones, ya no resultaban los encantos de una joven, ya no era joven.
Ahora es cuando le empezaba a costar salir de la cama, reconocía la llamada del desanimo. Pensaba que quizás es a esto lo que llaman la depresión.
Desde aquí, desde tan abajo, se hizo algunas preguntas que a su vez llevaban a otras. ¿Qué es lo que yo sé hacer? ¿Qué hay más allá de una oficina?¿Para qué puedo servir?...Soy una persona sociable, me gusta la gente y el trato con el público. Me encanta leer, me encantan las historias, es más, me sé muchas historias…cuando vienen amigos de fuera a visitarme les encanta que les enseñe esta ciudad a través de las historias que guardan sus antíguas paredes. ¿Y si escribo un libro de historia de mi ciudad? ¿pero, quién me lo iba a publicar¿?Y de qué vivo mientras?.. ¿Y si me invento una columna semanal en el periódico local basado en la historia?, pero de eso no puedo vivir.. ummmmm. Un anuncio, si, podría anunciarme para hacer excursiones guiadas por la zona antigua para turistas españoles. Podría hacerlo de un modo original y con humor.
Pepa tardó una semana en crear dos rutas por dónde pasar a turistas y se preparó las historias que iría contando. Mientras esto arrancó, perdió el piso hiotecado y estuvo viviendo en un piso compartido. Poco a poco fue recibiendo llamadas de los flyers que dejó en los hoteles y fue creando un personaje que cada vez era más buscado. Ahora incluso le contrataba el propio ayuntamiento para algunos grupos especiales. Es más, ahora han aprobado el presupuesto para publicar su libro de historia de la ciudad. Hace una semana que ya se puede pagar un piso alquilado para ella sola, donde entra el sol por las mañanas mientras desayuna y repasa sus escritos de la noche anterior. El día le espera con 3 excursiones y muchas horas para escribir. Le gusta su trabajo y ahora lo valora todo mucho más.
Para mí Pepa es mi mitolo, una persona cualquiera que de una crisis es capaz de encontrar el coraje, creatividad y un presente en el que se siente llena. Reinventarse es mi mitolo.

Ahora pienso que eso me direis que no corresponde ni a un mito, pero sí que es posible que sea mi ídolo.
LA HISTORIA DE ÍDOLOS Y MITOS EN LA VIDA DE ROMANIE
A los ocho años el novio de mi madre me regaló un libro de segunda mano llamado Pipi Longstocking. La noche que me leyó el primer capítulo me quedé fascinada por un personaje que acababa de conocer y del que quería saber más. Fue un flechazo a primera vista. Durante las próximas jornadas en las que me leyó un capítulo por noche entablé una relación íntima con esa niña, no me defraudó en nada. Cada vez que la conocía más, más fascinante me parecía. Al terminar el libro me empezó a faltar algo, quería seguir compartiendo experiencias inolvidables. Como la echaba de menos, decidí convertirme en ella. Me hice un disfraz, zapatos enormes de mi madre, medias rotas de diferentes colores, una falda-pantalón(muy de moda en aquel entonces) y una blusa vieja, al que cosí un montón de parches de colores. MI peinado diario sin duda fueron un par de trenzas. Durante dos años de mi vida iba por el campo encarnando el personaje de Pipi, reproduciendo sus hazañas e inventándome las mías inspiradas en el personaje. A falta de caballo, le coloqué una cuerda que unía ambos extremos del manillar de mi bici Bh roja y controlaba la dirección con supuestas riendas. Mis vecinas ibicencas Paquita y Lidia eran mis Tommy y Anika.
  Después de dos años Pipi Calzaslargas fue sustituida por Madonna creyéndome el personaje de Buscando A Susan Desesperadamente (otro ídolo, en este caso uno del que no me siento orgullosa, pero en el fondo creo que representaba lo mismo que Pipi. Una mujer que hace lo que le da la gana) y después de un par de años Madonna fue sustituida por el colectivo general y global del mundo de los caballos. Los caballos absorbían el 100 por cien de mi energía. Otro símbolo de la libertad, pero cada vez más erótico, no? A partir de ese momento ya no recuerdo más episodios tan exagerados, quizás en el fondo existen pero la madurez los camufla mejor, yo qué sé. Con esta oportunidad que me ofrece este ejercicio miro desde aquí y debo decir que Pipi es aun mi mitolo, es mi auténtica ídolo. No caduca con los años, coge más fuerza.No intento convencer a nadie pero creo que se podría decir que Pipi era la primera auténtica Hippie, todos los que crecimos en los 70 somos Pippis Pippy es Hippy!!!!
 o sea que ya sabeis, dentro de poco quizás me encontreis con coletas rojas otra vez. 

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